Monday, November 9, 2020

¿Enseña Marcos 16:16 que el Bautismo Salva?

 


Marcos 16:16 “El que creyere y fuere bautizado, será salvo; mas el que no creyere, será condenado.


Este versículo es mal usado, con frecuencia, para propagar la falsa doctrina de la regeneración bautismal, o sea, la creencia que el bautismo salva. El romanismo y algunas denominaciones, que rastrean su origen a él, enseñan que el bautismo es parte de la salvación. ¡Esta es una herejía destructora! El bautismo bíblico es de los creyentes, es por inmersión, y es solo simbólico. El bautismo es solo una muestra externa de una decisión interna. Es una buena obra para quienes ya fueron salvos; la salvación no es por buenas obras.


Si Marcos 16:16 no enseña que la salvación es por el bautismo, entonces, ¿Qué enseña? Enseña que el bautismo es importante. Cuando una persona cree en el Señor Jesucristo, debe bautizarse. Tampoco hay porque esperar. En los casos bíblicos donde una persona creyó y se bautizó, ésta se bautizaba en seguida. El carcelero filipense es un ejemplo de esto:

Hechos 16:32-33

Y le hablaron la palabra del Señor a él y a todos los que estaban en su casa. Y él, tomándolos en aquella misma hora de la noche, les lavó las heridas; y en seguida se bautizó él con todos los suyos. 


La frase “fuere bautizado” es una frase clarificadora y no calificadora. Describe, no califica. No pone un requisito para la salvación, sino que describe cómo es aquel que Dios salva. Los que creen, deben bautizarse. Considere esta lógica: si uno nace en Chile y tiene piel blanca, es chileno. Esta frase es correcta. De hecho, describe a tres de mis hijos. Sin embargo, sería incorrecto decir que uno tiene que tener piel blanca para ser chileno. Esto mismo es verdad en nuestro versículo. Si uno no tiene piel blanca, no significa que no puede ser chileno. Y si uno no se bautiza, tampoco significa que no puede ser salvo. El malhechor que fue crucificado al lado de Jesús ilustra esta verdad. Él se convirtió cuando fue crucificado con Jesús y, sin haber sido bautizado, Jesús le dijo, “De cierto te digo que hoy estarás conmigo en el paraíso.” (Lucas 23:43).


Los versículos complejos siempre se interpretan con versículos claros y a la luz del contexto de la Biblia entera. Es cierto que Marcos 16:16 parece posiblemente contradecir la multitud de versículos que revelan que la salvación no es por obras. Es importante recordar que en casos así, cuando hay una aparente contradicción, es solo una confusión en la mente del lector. La Biblia no se contradice. Es infalible. La clave para entender Marcos 16:16, está en esta frase: “el que no creyere, será condenado.” El versículo no dice que si uno no se bautiza será condenado, y esto es porque la única manera de ir al infierno es si uno no cree en el Señor Jesucristo. Jesús, en su interacción con Nicodemo, nos confirma esto:

Juan 3:18  El que en él cree, no es condenado; pero el que no cree, ya ha sido condenado, porque no ha creído en el nombre del unigénito Hijo de Dios.

Después, en el mismo capítulo, Juan el bautista lo afirma:

Juan 3:36  El que cree en el Hijo tiene vida eterna; pero el que rehúsa creer en el Hijo no verá la vida, sino que la ira de Dios está sobre él. 


Romanos 1:16 dice que el evangelio de Cristo es el poder de Dios para salvación a todos los que creen. En 1 Corintios 1:17 se hace una clara distinción entre el bautismo y el evangelio. Si el evangelio es el poder de Dios para salvación, y el bautismo no tiene nada que ver con el evangelio, entonces es evidente que el bautismo no tiene nada que ver con la salvación.


Las tres siguientes verdades de la Biblia excluyen la posibilidad de que el bautismo pueda salvar el alma de una persona:

1.       La salvación es solo por medio de la fe. (Genesis 15:6, Juan 3:15-16, 3:18, 3:36, 5:24, 6:40, 6:47, 11:25-26, 12:46, 20:31, Hechos 13:39, 10:43, 16:31, Romanos 1:16, 10:9-10, Gálatas 3:22, 1 Juan 5:12-13)

2.       La salvación no es por buenas obras. (Romanos 3:20, 3:24, 3:28, 4:5, 11:6, Gálatas 2:16, Efesios 2:8-9, Tito 3:5)

3.       El bautismo es  una buena obra. (Mateo 3:15Deja ahora, porque así conviene que cumplamos toda justicia.”)


La evidencia bíblica es bastante concluyente que la salvación es por gracia por medio de la fe y que no es por obras. Tito 3:5 dice que la salvación no es por obras de justicia y Jesús llamó al bautismo una obra de justicia en Mateo 3:15. El bautismo es un paso importante de obediencia, pero sabemos que las aguas del bautisterio no lavan los pecados. Nuestro Señor Jesús se bautizó y Él no tuvo pecados para ser lavados.


¿Enseña Marcos 16:16 que el bautismo salva? La respuesta rotunda es no. Ningún acto externo podría lograr lo que la sangre de Jesús milagrosamente hace en lo interior cuando un pecador se arrepienta para con Dios y tiene fe en el Señor Jesucristo.